Día 10. Nagano

Ayer fue un día duro. No, no por culpa de una paliza de itinerario… Sino por abandonar Takaragawa Onsen. Ese lugar idílico que llevaba tantos meses viendo en foto… Ya se había disfrutado y tocaba pasar a otra cosa mariposa. Lo que quizás no echo tanto de menos es dormir en futón (las cosas como son).

El shuttle bus del propio hotel nos llevó de nuevo a la estación de Jomo-Kogen, desde donde cogimos un primer tren bala y a los diez minutos hicimos transbordo a otro shinkasen. Pasado el mediodía llegamos a Nagano, donde haríamos una parada y noche en nuestro itinerario (sobre todo, para reducir trayectos). El hotel Gran chisun Nagano se encuentra a 5 minutos de la estación, así que llevamos allí las maletas y mientras, como el check no es hasta las 14h., nos vamos al Templo Zenkojin. La calle que da acceso al recinto está llena de comercios con amuletos y figuras más baratas que en los propios templos. Creo recordar que se llama Calle Nakamise.

Y el templo en sí en una pasada. A mí me gustó mucho. Conserva su aire tradicional y los edificios son muy bonitos, además hay rincones muy chulos para fotografiar (solo hay que pagar por subir a la segunda planta del edificio principal y para entrar a un salón por dentro, nosotros no lo hicimos… Según lo que leímos que era, decidimos prescindir. El recinto es sí es gratuito).

Además, en la calle de entrada al templo (la de los comercios) y la grande que enlaza con esa calle (Omotesando) en algunos puntos, tienen mini templos que también merecen la pena 🙂

Ah! Cuando íbamos de camino al templo comimos en este lugar (no digo nombre porque sólo lo he encontrado en escritura japonesa jajaja) Dos bandejas de comida japonesa y una cerveza, unos 16 euros (estaba muy bueno, pero tengo que decir que a la tarde me dolía el estómago)

Además, está al lado de una calle muy retro y molona por la que dimos un paseo de vuelta al hotel.

El resto del día lo pasamos descansando hasta la noche. Fuimos a un par de tiendas frikis de Nagano y a cenar en una hamburguesería hawaiana (aquí todas las que hemos visto son hawaianas jajaja). Se llamaba mountain q y cenamos por unos 26 euros los dos (hamburguesa con patatas, super tortitas con arándanos, dos limonadas naturales y dos cervezas).

Hoy hemos madrugado y estamos de camino al Castillo de Matsumoto… Pero eso ya os lo cuento mañana ^^

Un beso enorme!!

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