Día 8 y 9. Takaragawa

Ayer llegamos a Takaragawa y hoy seguimos por aquí. Se trata de un lugar no muy habitual en los itinerarios habituales por Japón y que yo descubrí por casualidad durante los meses de pleno estudio del viaje. Se trata de un rotemburo (baño termal al aire libre) que se encuentra en los llamados Alpes japoneses. Soy muy aficionada a los baños termales y una de mis mayores ilusiones era visitar un lugar así: en plena naturaleza, aguas termales y lo mejor de todo… Mixto! Es decir, Víctor y yo podríamos estar juntos (es más común algunos onsen – baños interiores – mixtos, a exteriores como éste). Eso sí, los hombres van desnudetes, sólo con una minitoalla tapando sus partes íntimas.

Para llegar allí, desde Tokio hay casi una hora en tren bala y después te vienen a recoger en un bus los del hotel. Al llegar, rellenamos ficha y llegó un momento muy guay… Elegir nuestro yukata (vestimenta japonesa para nuestra estancia).

El alojamiento, tipo ryokan, es antiguo (no estaría mal alguna que otra reforma) y muy rural (por la noche encontramos una super araña en la habitación y tuve que ir a recepción para que la matasen jajaja). Nuestro cuarto, pese al precio (algo más de 200 euros noche con media pensión), no tiene baño privado, pero es enorme. Al entrar, tenemos un recibidor donde dejamos los zapatos y después accedemos a un segundo recibidor con espejo… Que al cruzar llegamos a la habitación central con una mesa y dos sillas a ras de suelo y el espacio para los futones. Además, unas puertas correderas nos dan acceso a una especie de terraza cerrada con vistas al río (el sonido del río no cesa en todo el día, es agradable).

El alojamiento consta de un onsen (pequeño baño interior público dividido por sexo) y rotemburo. El rotemburo, que es donde nosotros estamos haciendo vida, consta de 3 baños diferentes (a cada cual más caliente) y un cuarto que es solo para mujeres. Lo «bueno» de este rotemburo, que aunque sea mixto, las mujeres van como una especie de toalla-vestido que te dan en recepción para estar en los mixtos exteriores (aunque de noche, como estábamos solos yo me lo quité y se estaba mejor ^^).

Aquí en los alrededores no hay absolutamente nada (sólo bosque y un restaurante para comer que calidad precio es caca, pero no hay otro sitio) y la cena y desayuno sin tipo buffet en el propio hotel (no están mal).

En resumidas cuentas, estos dos días nos han venido genial para la parte relax honeymoon jajajaja y además, he estado en un lugar con el que tantas veces había soñado. Si tenéis muchos días para un itinerario extenso os recomendamos pasar por aquí (al menos una noche), porque sin dudar, es un sitio mágico 🙂

P.d tienen 3 osos enjaulados en una zona. Son muy majos, pero dan mucha pena 🙁 hay carteles que dicen que no son para comer… Pero yo ya había leído por internet todo lo contrario. Si venís, no tenéis porqué verlos, no es zona de paso.

Os dejo unas fotitos de por aquí… Y mañana os cuento nuestra puesta en marcha hacia Nagano! Se acabó el estar como pasas :(((

 

Por cierto!! El rotemburo está abierto 24 horas. Los baños nocturnos son los mejores 🙂 en serio, tenéis que pasar por aquí!!

Share this post

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *